El caldo de verduras es una base sabrosa y más saludable que los caldos industriales, ideal para preparar risottos, sopas, salsas, purés, cereales y otras recetas. Ligera y versátil, realza el sabor de los alimentos sin apelmazarlos, convirtiéndose en una excelente opción para quienes buscan practicidad con un toque casero.
